miércoles, 4 de abril de 2012

Regidor sí firmó por la revocatoria del alcalde de San Ignacio

Ante la negativa pública aclaran a concejal oficialista
San Ignacio. “El Regidor Carlos Fernando Huayamís Zúñiga, sí firmó el planillón de revocatoria contra el Alcalde de San Ignacio, Carlos Martínez Solano”; así lo confirma Mateo Saavedra Suárez, colaborador de este proceso.

El regidor mencionado salió a desmentir públicamente que jamás firmó y que falsificaron su firma con el propósito de perjudicarlo políticamente; además, amenazar de presentar denuncia contra los responsables de la supuesta calumnia en su contra.

El hecho hubiese pasado desapercibido, si no se tratase de uno de los regidores de mayor confianza del burgomaestre san ignacino, quien aparentemente le profesaba lealdad incondicional.

Fuerza Campesina, organización política que gobierna el concejo provincial, emitió un comunicado rechazando la supuesta calumnia de firma contra su líder el alcalde de San Ignacio, inclusive con calificativos denigrantes contra los que informaron de este suceso; hoy ante las evidencias, hacen un silencio que demuestra su arrepentimiento por haberse apresurado a opinar antes de investigar bien los hechos.

Lo grave es que el firmante regidor, hizo alarde de principios y valores por los cuáles y pueblo lo eligió, y desacreditó a la comisión de revocatoria llamándolos mentirosos, falsificadores de firmas y como un grupito que está en contra del desarrollo de esta provincia.

Además se atrevió a retar para que le demuestren si su firma y huella digital le correspondían, poniendo en duda a la población; sin embargo, ante las evidencias y testigos está quedando claro que el regidor miente para evitar la desconfianza personal de su gente y, alguna sanción que su organización política le pueda aplicar.

Pero al margen de estas conductas éticas, el ministerio público será solicitado para que investigue el suceso puesto que al haberse denunciado una falsificación de firma y huella digital, así como haber achacado tal hecho a los revocadores y difamado a través de medios de prensa, ya constituyen delitos sancionados por ley.